por Francisco Rubiales.
Mi editorial, "Almuzara", me había preparado una entrevista en el programa "La noche menos pensada", de Radio Nacional de España, conducido por Manolo HH, para hablar de mi libro "Políticos, los nuevos amos". Me desplacé a Madrid y estaba en el hotel cuando me llamaron de la emisora: "el coche ya sale para recogerle. Esté preparado en el hotel porque llegará en media hora". Eran poco más de las doce de la noche. Tres minutos después me llama el propio Manolo HH. Compungido, me contó un "cuento": el hermano de mi mujer ha sufrido un infarto y tengo que marcharme de la emisora. No puedo entrevistarle. Le ruego me disculpe. Esta noche emitiremos entrevistas grabadas.
Los olores de la mentira y del miedo son inconfundibles y los periodistas viejos y curtidos en muchas batallas los percibimos con asombrosa facilidad, incluso a través de la línea telefónica.
Investigué y por fin he conseguido la certeza: sufrí un veto político. Manolo HH se justifica porque dice que recibió una llamada "del poder" que vetaba mi libro. Todo un acontecimiento: un veto político en democracia, en la radio pública.
Al poder no le gusta la crítica y hay periodistas que se prestan al sometimiento, que, lamentablemente, han renunciado a la independencia y a la verdad, quizás en espera de ser recompensados. Es una lástima y una lacra para la profesión.
Durante mi vida como periodista de la Agencia EFE he compartido tareas con muchos corresponsales de RNE, con Asunción Valdes, Joaquín Tagar, con Eduardo Sotillos, Rafael Ortega y otros muchos, cubriendo noticias en América y Europa. Siempre he visto en ellos a compañeros que, con independencia de las propias ideas, respetaban la verdad y ejercían como profesionales dignos y libres.
La experiencia con Manolo HH es mi primer encontronazo con la censura y la vileza en democracia, desde la muerte del dictador.
"Políticos, los nuevos amos" no es un libro censurable, sino un libro respetable. Tiene más de trescientas citas y soportes científicos en sus páginas, está prologado por un ex ministro del Reino de España (Manuel Pimentel) y ha sido publicado en una colección donde también publican B. Barber, W. Kristol, R. Kagan, C. Alarcón, R. Soriano y otras firmas de indiscutible prestigio. Su autor es doctor en periodismo, profesor universitario y posee una experiencia muy rica en periodismo de trincheras. Censurarlo es, además de un atentado contra la libertad, una horterada cateta.
He sido entrevistado sobre mi libro "Políticos, los nuevos amos" por casi una veintena de medios y sólo en uno, en RNE, he detectado la censura. Es duro y frustrante comprobar que el general sigue vivo en la radio pública española y que, después de aquel largo camino que tantos cubrimos de resistencias. carreras ante los "grises", hojas lanzadas en "vietnamitas", luchas por la libertad e ilusiones, tres décadas después de haber conquistado la democracia, la censura sigue actuando, impulsada por un gobierno presuntamente democrático o, lo que quizás sería peor, alentada por periodistas sometidos que sólo pretender hacer méritos ante el poder, en espera de ser recompensados.
Como ciudadano, sólo me queda una reacción digna ante el atropello: contarlo y borrar a RNE del dial de mi receptor. El boicot y la protesta rebelde e indignada es la única arma que le resta al ciudadano frente al totalitarismo. Lo contaré en mi blog, lo contaré en mis conferencias, se lo contaré muchas veces a mis alumnos de la universidad, se lo contaré a quien prologa mi libro, le pediré a mis amigos que me ayuden a difundirlo, lo mencionaré en mis conversaciones y hasta escribiré algunas cartas a algunos amigos con responsabilidades políticas para que sepan que el denostado general no sólo "habita" en su tumba del Valle de los Caídos, sino que está también vivo en la radio pública española.
A todos les pediré que borren a RNE del dial.
2 comentarios:
Leo agradecido por el modo, pero con sorpresa por la propia sorpresa del que escribe el libro.
Me hace pensar que tantas horas cerca de tan ilustres compañeros, unido a seguro muchísimas horas para documentar, escribir y editar, no le dejaron ver el bosque.
En los 36 años que llevo pegado a lo que nació como profesión, siempre, repito, siempre, ha habido censura en todos los medios de información. En los que controla el gobierno y en los que no.
(Cuando esta pregunta se hace en voz alta, se responde; son estos y no los otros los que censuran. Siendo estos los que son, y los otros los otros, porque ni estos ni los otros son honrados)
Las verdades a medias también son mentiras, las de estos y las de los otros, y eso, no es honrado. la honradez, como muy bien sabe usted, tiene muchas más acepciones que la de no robar.
No son pocos los que se dieron la vuelta, tampoco lo son los que creían que las cosas tenían que ser así, y quizás sean menos, pero también entran los bien “PAGAOS” Perdóneme señor mío, con cualquiera de los gobiernos, y con independencia de su color, hace ya muchos años que se practica.
Como estoy seguro que usted que vivió la España de Franco sabe, surgieron dos grupos económico- político- periodístico con tendencias tan claras en cuanto a censura, que hoy día siguen funcionando para los mismos fines.
Los que tenían EL MUNDO, y los que tenían PRISA.
Por supuesto a la sombra de ellos han surgido satélites de uno y otro lado que ejercen la censura de los que llevan razón, la suya, la que conviene a sus intereses.
Quizás también por las mismas razones, las de sus intereses, se vendan cada vez menos periódicos y estos necesiten de una subvención al papel que paga el Estado, ósea, usted y yo entre otros muchos
Una posible solución a estas cosas, podría ser VOTARLES en blanco para BOTARLES de los gobiernos, ayuntamientos, partidos, periódicos, radios, televisiones, y todo lo que la política es capaz de comprar.
¿Usted no lo vio, o se entero muy tarde?
Mientras el país con más o menos estilo en las formas se iba democratizando, los medios de comunicación se posicionaban dependiendo de las ideas políticas que les parecían mas correctas económicamente a sus bolsillos, abandonando el pluralismo y la independencia que cacarean.
Se dejo hace mucho tiempo de hacer periodismo para llevar las consignas de partidos políticos, gobiernos, o personajes influyentes a los medios, por esto me siento sorprendido por su sorpresa, por que estando tan cerca del mundo de la prensa ……..
Sigo si cabe más sorprendido que cuando escribí el anterior comentario.
Tengo la sensación de que lo que aquí se vuelca como opinión, ni a los creadores de la PAGINA que así mismo se llaman Prejubilados Liberales, ni al resto de los posibles lectores, les interesan las opiniones que difieran de las suyas.
De momento y para no parecerme a lo toda la prensa llama clase POLITICA, dejare como duda razonable que las ideas solo son de los creadores de tal PAGINA y no de cualquier otra directriz.
De veras me gustaría que este espacio al parecer de trabajadores, (y digo trabajadores por que lo de compañeros parece autoría de los SINDICATOS que nacieron para un fin que no era marcar el nuestro) sirviera para despojarnos de cualquier color político, bandera, o peloteo.
Si de veras sois de los de muchos años en la empresa, (y digo empresa, por que la casa, al menos la mía, siempre tuve claro donde estaba y quien la pagaba) sabéis de sobra que todos hemos sido usados por los diferentes gobiernos, así que no les demos hoy posibilidad de que ninguno cuente con nosotros, juzguemos las cosas de todos, no seamos solo una parte, ¿por que ser un ombligo cuando se puede ser un cuerpo.?
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